Existe la asociación de estímulos en este anuncio. En la
imagen aparece el producto asociado inmediatamente después de que aparezca la
silueta femenina. Aparece el reforzador primario sexual, ofreciendo una imagen
de la mujer en la cama semidesnuda en posición muy placentera. Los reforzadores
secundarios que identificamos son el reconocimiento social que le reportará
tener un buen cuerpo y el éxito social, que vendrá acompañando a ese
reconocimiento ya adquirido.
Observamos como en este anuncio hay una clara apelación al
miedo a la vejez, a dejar de ser atractivo con la edad, dejar de gustar porque
el paso del tiempo ha cambiado tu cuerpo y se crea una falsa necesidad de
mostrarse joven y que el paso del tiempo no ha generado un deterioro en el
físico.
Encontramos en el final del anuncio un meme lingüístico, que
es una palabra genéricamente positiva: “funciona” con la finalidad de
generar confianza en el producto.
La técnica de repetición aparece continuamente presentando
el cuerpo de la mujer con una buena silueta. Además, identificamos que la
música transmite una sensación esperanzadora de que el producto va a cumplir
con las expectativas creadas. Por otro lado, la mirada directa al observador
está presente acompañada de un mensaje directo al consumidor: “¿y si empezamos
esta noche?”.
El rol social más llamativo que encontramos es el de “mujer perfecta” que debe evitar el deterioro de su cuerpo para mantener el ideal de belleza impuesto por la sociedad.
A modo de conclusión, se trata de un anuncio publicitario
que manipula los datos que presenta en la letra pequeña no coincidiendo
completamente con la letra más visible del anuncio. En las pruebas realizadas
con el producto el número de mujeres era reducido, dirigido a la grasa
superficial en las caderas mientras el anuncio pretende mostrar que el efecto
del producto actúa sobre todo el cuerpo y reduce todo tipo de grasa corporal.
No hay comentarios:
Publicar un comentario